Con solo 11 años Mikaila nos demuestra que cuando haces las cosas con amor recibes grandes recompensas.
La historia de amor de Mikaila y las abejas empezó de una forma dolorosa. Mikaila encontró un panal en un árbol cerca de su casa y por su falta de conocimiento las molestó con un palo.
A pesar de que Mikaila corrió todo lo que pudo, un par de abejas la alcanzaron y le propinaron sendas picaduras.
A raíz de esta experiencia sus padres la alentaron a conocer más acerca de estos maravillosos insectos.
Mikaila se enamoraba más de las abejas a medida de que las iba conociendo.
Fue así como descubrió el papel fundamental que juegan las abejas para en el equilibrio del ecosistema y el grave peligro que corren por múltiples amenazas.
Reuniendo dinero para las abejas
Para juntar dinero y ayudar a las abejas, esta talentosa chica comenzó a vender limonada fiel a una receta de su abuela, pero le agregó su ingrediente secreto, un poco de miel.
La nueva receta de Mikaila fue todo un éxito y pronto su padre vio que además de ayudar a las abejas, había una oportunidad de negocio.
Con la ayuda de algunos amigos desarrollaron una marca y se presentaron a un conocido programa de TV.
Lograron ganar U$60.000 para su proyecto, además de llamar la atención de una importante cadena de supermercados (Whole Foods) que les ofreció un millonario negocio.
En su momento Mikaila fue invitada por Barack Obama a la Casa Blanca y fue nombrada como una de las 10 empresarias más innovadoras del año en su región.
A pesar del éxito del negocio, Mikaila insiste en que su principal motivación es ayudar a las abejas: ¨es la solución de un problema en este mundo¨.
Grandes ideas nacidas del amor crean grandes cambios en el mundo, y esta niña es el mejor ejemplo.
Hoy el negocio de Mikaila crece sosteniblemente, así como los fondos que reciben de ella las fundaciones que se dedican a cuidar a sus adoradas abejas.