Tiempo de una nueva educación

Todo evoluciona, todo cambia. Para algunos pesimistas los tiempos cada vez son peores, sobre todo en materia de educación, para nosotros no es así. Si bien hay mucho por mejorar, sobre todo en un país como el nuestro, vamos avanzando a pasos de gigantes.

Por. Geovanni Bernal A. – Editor El Vocero

Una nueva era ha llegado a nosotros de la mano de la tecnología y la conectividad, tenemos una oportunidad de oro para volver a integrarnos como comunidad, como raza.

Es ahí donde radica la nueva educación, en transformar el individualismo al que nos somete la competencia, y empezar a pensar como grupo, como comunidad, como tribu.

La educación necesita ser prioridad

Las más sólidas tribus se forman a través del desarrollo individual de las capacidades mentales, físicas y emocionales para ponerlas al servicio de los objetivos comunes. Cada miembro es indispensable en el correcto funcionamiento de la tribu, aún así, puede ser reemplazado sistemáticamente por otro par sin que esto afecte el buen desarrollo de la comunidad..

¿Cómo llegar a lograrlo? Empezando a formar al ser integral, no solo al que memoriza datos, hace sumas y restas y es ágil con las piernas, hay que ir al fondo, a sus motivaciones, a sus miedos, a su visión del mundo que habita, el conocimiento cada vez está más al alcance de todos, se puede convertir en un experto en la materia que desee sin salir de la casa, eso sí, con una conexión a internet.

Es tiempo de cambiar el enfoque, de educar al ser para el servicio mutuo, para vernos reflejados en el otro, para entender que la diferencia construye, para empezar a preguntar más y a suponer menos, para soltar el celular y meditar en un parque, para cambiar el alimento diario del cerebro, poner atención a la música que se escucha, invertir más tiempo en compartir en familia, no viendo televisión, sino hablando, compartiendo, es hora de una nueva educación en todos los escenarios.